La Cámara de Comercio de Osorno manifestó su preocupación por el crecimiento de este tipo de recintos, que operan bajo esquemas de formalidad incompleta y distorsionan la competencia con el comercio establecido.
El presidente de la Cámara de Comercio e Industrias, Servicios y Turismo de Osorno, Luis Rigo-Righi, junto al directorio del gremio, expresó su preocupación frente al aumento de los llamados malls chinos en distintas ciudades del país, incluido Osorno, advirtiendo que esta modalidad de comercio “mezcla prácticas formales e informales que afectan gravemente la competencia leal, la seguridad del consumidor y la recaudación fiscal”.
El dirigente hizo eco del reciente estudio elaborado por la Cámara Nacional de Comercio (CNC), que reveló cifras alarmantes: solo 4 de cada 10 locales exhiben patente comercial visible; casi la mitad vende productos sin certificaciones sanitarias o de rotulación, y en más del 45% se detectaron artículos falsificados o de origen dudoso. Además, un 15% de las compras no recibe boleta, y solo en un tercio de los casos se entrega cuando se solicita.
“Como gremio local compartimos plenamente la preocupación nacional. No podemos permitir que este tipo de establecimientos se consoliden en nuestras ciudades sin los controles que se exigen al comercio formal, que cumple con todas las normas, paga impuestos, genera empleo estable y aporta al desarrollo local”, enfatizó Luis Rigo-Righi.
Desde la Cámara osornina señalaron que este fenómeno no solo representa una competencia desleal, sino también un riesgo sanitario y económico para los consumidores, ya que muchos de los productos comercializados carecen de trazabilidad, etiquetado en español o certificaciones básicas de seguridad.
Asimismo, el gremio llamó a las autoridades locales y nacionales a reforzar la fiscalización, especialmente en materia de patentes, tributación y cumplimiento de normas sanitarias. “No se trata de estigmatizar a nadie, sino de exigir igualdad de condiciones para todos quienes desarrollan una actividad comercial en Chile. La informalidad no puede normalizarse”, concluyó el presidente del gremio.
Finalmente, la Cámara reiteró su compromiso con la defensa del comercio formal, el fortalecimiento de la actividad local y la protección de los consumidores, subrayando que “una economía sana y transparente es responsabilidad compartida entre empresarios, autoridades y ciudadanía”.

